miércoles, 30 de diciembre de 2009

Revista Woman


Gómez, Irene C.; (2009); Revista Woman; página 93

JORGE BUCAY

Recomendaciones de un gurú

¿Pérdida entre tanto libro de autoayuda?
El maestro argentino nos orienta entre el maremágnun del género y nos regala sus sabios consejos.
Hablamos con una de las voces fundamentales -y más vendidas- de la autoayuda en castellano: médico, terapeuta gestálico y autor de bestsells como “Déjame que te ayude”.

¿Qué debe tener un libro de autoayuda para ayudar?Cualquier libro que contribuya a tomar conciencia sobre uno mismo o que favorezca un cambio positivo en una persona, podía considerarse de autoayuda. Muchas obras de la literatura universal han ayudado a miles de personas a conocerse mejor. Siempre cuento que pocas cosas me han ayudado a miles de personas a conocerse mejor. Siempre cuento que pocas cosas me han ayudado más que “La casa tomada” de Julio Corázar, y a nadie se le ocurrirá afirmar que Cortázar escribe autoayuda. Lo que hoy llamamos “libros de autoayuda” son obras de divulgación que traducen a un lenguaje comprensible técnicas de la psicología para que cada uno extraiga enseñanzas útiles para su situación personal. Quizá fue Alfred Adler, discípulo de Freud y padre de la psicología individual, el primero en escribir autoayuda: “Comprender la vida”.

¿Por qué cree que el género tiene tanta incidencia social?Vivimos en una realidad que impone un ritmo frenético, estresante e incierto que nos impide disfrutar de todo lo que tenemos. La conciencia de que el problema es de adentro y no de afuera invita a buscar las respuestas en la psicología, tanto en los libros como enla consulta con el especialista.

¿Qué libros incluidos en el género no asociaría a este?Aquellos que ponen énfasis en el éxito personal y económico como único objetivo válido en la vida. Los libros de adivinación o de astrología y los textos de sanaciones alternativas, casí mágicas, para enfermedades diagnosticadas como “difíciles” o “crónicas” para las ciencias médicas.

Muchos creen que estas obras constituyen una terapia en sí misma. Como psicólogos, ¿Qué opinas?
Una terapia, no, una ayuda es posible, y en ese caso siempre depende de la actitud del lector. A veces, contemplar un amanecer puede producir un cambio en nosotros. ¿Cómo no aceptar que puede tener un efecto positivo la lectura de un texto que ha sido escrito con esa finalidad?

Realmente, ¿existen recetas para vivir?Si existen las recetas infalibles, yo no las conozco y desconfío de las que se ofrecen, porque sé que no existen un plano único que sirva para guiar a todo el mundo hacia una meta. Cada persona tiene que recorrer su camino y aprender de él, aunque, posiblemente, puede compartir algunas cosas básicas de la propia experiencia y apostar a que a otros les puedan ser útiles.

¿Qué tipo de libros triunfan en estos tiempos difíciles?Las principales consultas a los terapeutas se centran en el miedo, la ansiedad y la depresión y, por esa razón, existen muchísimas obras sobre estos temas y sobre cómo afrontar una situación complicada. Sin embargo, ningún libro reemplaza a una consulta profesional.

Su consejo para afrontar la crisis.Creo que la crisis son periodos que aparecen cíclicamente y que debemos aceptar. Como dicen los chinos, crisis equivale a la suma de riesgos y oportunidades. Una crisis puede también ser el momento de replantearnos algunas cosas sobre nuestro modo de vida y sobre los cambios que se hacen necesarios para seguir nuestro camino.

¿Qué recomienda para gestionar esta incertidumbre?Solamente una cosa: nada es más dañino que el miedo al propio miedo. La incertidumbre necesita que seamos capaces de ver los peligros y animarnos a enfrentarnos a ellos, confiando en nuestros recursos y tratando de multiplicarnos.

¿Qué otro tipo de cosas nos pueden “autoayudar”?Cualquier actividad que nos conecte con desarrollar lo que somos, sin máscaras: estar con amigos, explorarse en talleres de crecimiento personal o en terapia psicológica, ver una buena película pasear por un lugar sereno y mi favorita: escribir.

viernes, 25 de diciembre de 2009

FRASES CÉLEBRES

“Sólo si me siento valioso por ser como soy, puedo aceptarme, puedo ser auténtico, puedo ser verdadero”.


“El verdadero buscador crece y aprende, y descubre que siempre es el principal responsable de lo que sucede”.

“Porque nadie puede saber por ti. Nadie puede crecer por ti. Nadie puede buscar por ti. Nadie puede hacer por ti lo que tú mismo debes hacer. La existencia no admite representantes”

“No somos responsables de las emociones, pero sí de lo que hacemos con las emociones”.

“Es cierto que nadie puede hacer siempre todo lo que quiere, pero cualquiera puede no hacer nunca lo que no quiere”.

“Estar cerca del que más sabe hace más sabio al que no sabe”.

“No te des por vencido antes de ser vencido”.

“Solo me inquieta un poco pensar que tal vez mañana yo sea demasiado viejo para hacer lo que he dejado pendiente”.

“La libertad es ser quien yo soy, no quien esperan que sea”.

“Creo que la felicidad puede lograrse, siempre y cunado uno no caiga en la estúpida idea de creer que ser feliz es estar riéndose todo el día”.

sábado, 5 de diciembre de 2009

El oso




EL OSO



Esta historia habla de un sastre, un zar y su oso.

Un día el zar descubrió que uno de los botones de su chaqueta preferida se había caído.

El zar era caprichoso, autoritario y cruel (cruel como todos los que enmarañan por demasiado tiempo en el poder), así que, furioso por la ausencia del botón mandó a buscar a su sastre y ordenó que a la mañana siguiente fuera decapitado por el hacha del verdugo.

Nadie contradecía al emperador de todas la Rusias, así que la guardia fue hasta la casa del sastre y arrancándolo de entre los brazos de su familia lo llevó a la mazmorra del palacio para esperar allí su muerte.

Cuando, cayo el sol un guardiacárcel le llevó al sastre la última cena, el sastre revolvió el plato de comida con la cuchara y mirando al guardiacárcel dijo – Pobre del zar.

- El guardiacárcel no puedo evitar reírse - ¿Pobre del zar?, dijo pobre de ti tu cabeza quedará separada de tu cuerpo unos cuantos metros mañana a la mañana.

- Si, lo sé pero mañana en la mañana el zar perderá mucho más que un sastre, el zar perderá la posibilidad de que su oso la cosa que más quiere en el mundo su propio oso aprenda a hablar.

- ¿Tú sabes enseñarle a hablar a los osos?, preguntó el guardiacárcel sorprendido.

- Un viejo secreto familiar... – dijo el sastre.

Deseoso de ganarse los favores del zar, el pobre guardia corrió a contarle al soberano su descubrimiento:

¡¡El sastre sabía enseñarle a hablar a los osos!!

El zar se sintió encantado. Mandó rápidamente a buscar al sastre y le ordenó:

-¡¡Enséñale a mi oso a hablar nuestro gustaría complaceros pero la verdad, es que enseñar a hablar a un oso es una ardua tarea y lleva tiempo... y lamentablemente, tiempo es lo que menos tengo...

-El zar hizo un silencio, y preguntó ¿cuánto tiempo llevaría el aprendizaje?

- Bueno, depende de la inteligencia del oso... Dijo el sastre.

- ¡¡El oso es muy inteligente!! – interrumpió el zar

– De hecho es el oso más inteligente de todos los osos de Rusia.

-Bueno, musitó el sastre... si el oso es inteligente... y siente deseos de aprender... yo creo... que el aprendizaje duraría... duraría... no menos de...... DOS AÑOS.

El zar pensó un momento y luego ordenó:

- Bien, tu pena será suspendida por dos años, mientras tanto tú entrenarás al oso. ¡Mañana empezarás!

- Alteza - dijo el sastre – Si tu mandas al verdugo a ocuparse de mi cabeza, mañana estarán muerto, y mi familia, se las ingeniará para poder sobrevivir. Pero si me conmutas la pena, yo tendré que dedicarle el tiempo a trabajar, no podré dedicarme a tu oso... debo mantener a mi familia.

- Eso no es problema – dijo el zar – A partir de hoy y durante dos años tú y tu familia estarán bajo la protección real. Serán vestidos, alimentados y educados con el dinero de la corte y nada que necesiten o deseen, les será negado... Pero, eso sí... Si dentro de dos años el oso no habla... te arrepentirás de haber pensado en esta propuesta... Rogarás haber sido muerto por el verdugo... ¿Entiendes, verdad?.

- Sí, alteza.

- Bien... ¡¡Guardias!! - gritó el zar –Que lleven al sastre a su casa en el carruaje de la corte, denle dos bolsas de oro, comida y regalos para sus niños. Ya... ¡¡Fuera!!.

El sastre en reverencia y caminando hacia atrás, comenzó a retirarse mientras musitaba agradecimientos.

- No olvides - le dijo el zar apuntándolo con el dedo a la frente – Si en dos años el oso no habla... – Alteza... -

...Cuando todos en la casa del sastre lloraban por la pérdida del padre de familia, el hombre pequeño apareció en la casa en el carruaje del zar, sonriente, eufórico y con regalos para todos.

La esposa del sastre no cabía en su asombro. Su marido que pocas horas antes había sido llevado al cadalso volvía ahora, exitoso, acaudalado y exultante...

Cuando estuvo a solas el hombre le contó los hechos.

- Estás LOCO – chilló la mujer – enseñar a hablar al oso del zar. Tú, que ni siquiera has visto un oso de cerca, ¡Estás, loco!

Enseñar a hablar al oso... Loco, estás loco...

- Calma mujer, calma. Mira, me iban a cortar la cabeza mañana al amanecer, ahora... ahora tengo dos años... En dos años pueden pasar tantas cosas en dos años.

En dos años... – siguió el sastre - se puede morir el zar... me puedo morir yo... y lo más importante... por ahí el ¡¡oso habla!!

martes, 1 de diciembre de 2009

Presentación

Somos los realizadores del blog:
León Moreno, Antonio Jesús
Marquez López, Javier
Praena Garcia, Magdalena

Y nuetro blog es dedicado a Jorge Bucay, por el gran interés que mostramos a sus cuentos y a la gran profundidad que le vemos a la enseñanza de sus cuentos.